¿Qué harás si te toca la lotería?
Se acerca el día de la tradicional Lotería de Navidad y los españoles nos gastaremos 71€ de media.
Este año, solo el gordo y los premios segundo y tercero mantienen la obligación de pagar impuestos, debido a que el importe exento es de 40.000€. ¿Cuánto cobraremos?
- Gordo de Navidad: Premiado con 400.000€ por décimo. Se tributará solo por 360.000 euros, sobre los que se gravará el 20%. Así, el premiado se quedará con 328.000 euros y Hacienda con 72.000 euros.
- Segundo premio: 125.000 euros al décimo. Se gravarán solo 85.000 euros, quedando 17.000 euros para Hacienda y 108.000 euros para el premiado.
- Tercer premio: Con 50.000 euros por décimo quedarían 2.000 euros para Hacienda y 48.000 euros para el dueño del boleto ganador.
A partir de los siguientes premios, no se pagan impuestos y se cobra el premio entero. Además tampoco se incluyen en la base imponible del IRPF. Así que no habrá que pagar más en la declaración de renta.
A los que habéis comprado algún número os quiero proponer un sencillo juego: Soñar.
IMAGINA QUE TE TOCAN 100.000€ NETOS EN LA LOTERÍA
PIENSA ENTRES COSAS QUE HARÍAS CON ESE DINERO
Te invito a reflexionar un momento.
Las personas utilizan el dinero de manera muy distinta, pero durante años he observado 4 perfiles muy definidos según las veces que dicen las palabras comprar, gastar o tapar agujeros.
¿Cómo utilizas el dinero?
1. Tiovivo
- Si eres de los que ha utilizado las palabras «comprar, gastar o tapar agujeros» en las 3 ocasiones os llamo «Tiovivo». Personas que tienen dificultades para ahorrar, no pueden afrontar gastos imprevistos y no saben cuánto pagan de luz. Este es el grupo al que pertenece la mayoría de las personas.
El Perfil «Tiovivo» son aquellas personas que no saben en qué se gastan el dinero, que no llegan a final de mes y están mareados de dar vueltas pensado: “no entiendo porque no me queda nada”.
2. Don Quijote
Si las has utilizado las palabras comprar, gastar o tapar agujeros en 2 ocasiones eres un «Don Quijote».
Son personas que ahorran algo en el banco de toda la vida con intereses míseros.
Pueden afrontar algún imprevisto de poco importe y entienden un poco de productos bancarios, como préstamos y fondos de inversión. Siguen un presupuesto y controlan sus gastos.
La mayoría de personas piensa en cancelar sus deudas, pero priorizan comprarse un coche, hacer un viaje o comprarse cosas que quizás no necesiten.
Y cuando se acaba el dinero… Vuelven a estar en el mismo punto de antes e intentando asumir más gastos de los que tenían.
3. Jinete de Élite
Si solo has utilizado esas palabras en 1 ocasión eres un «Jinete de Élite». Personas que son capaces de controlar su dinero. Que ahorran lo suficiente para poder tener una independencia económica ante cualquier imprevisto o que han sabido invertirlo en cosas que les generan dinero.
Perfil «Jinete de Élite». Personas que son capaces de controlar su dinero.
Son aquellos que trabajan con productos bancarios más complejos, invierten en bolsa, en inmuebles para alquilar, entre otros. Quizás tengan un asesor bancario que les ayude a planificar su jubilación.
Ante los caprichos, se detienen a valorarlos antes de gastar, aun así, no han dudado en usar la palabra gastar para hacer aquel viaje de sus sueños o comprarse el coche más caro para alardear delante de los amigos. De nuevo, el problema de comprar cosas que están fuera de nuestro nivel de vida habitual, es que luego no podemos asumir su gasto.
4. Pura Sangre
Si tus respuestas no han incluido esas tres palabras… ¡Enhorabuena! perteneces al extraño grupo de «Los Pura Sangre».
Personas que entienden y comprenden los temas económicos, que saben dónde invertirlos, que pueden afrontar imprevistos, y sobretodo, que gastan y compran más que nadie ya que lo hacen con los intereses o los ingresos obtenidos de sus inversiones.
Quizás hayan pensado en dar parte de ese dinero a algún familiar que lo necesita. Ante esto, lo mejor que podrían hacer es ayudarle a tomar la mejor decisión.
Todos nos relacionamos con el dinero de una forma u otra, y es fundamental aprender a no gastarlo de manera impulsiva, a saber ahorrar e invertir.